top of page

Conversatorio"SCADTA gana la carrera en llevar un avión a Bogotá"

Qué mejor manera de encaminar el futuro de un país que rememorando aquellos hechos que lo han llevado a ese punto; desempolvar “la caja de los recuerdos” a través de información vital de aquellos personajes que jugaron un papel importante en la historia, en este caso los pilotos alemanes.


Durante un crudo tiempo los pilotos alemanes tuvieron que adaptar la información que contaban a la empresa aeronáutica llamada Junkers Flugzeug und Motorenwerke sobre los hechos del país, ya que no querían desvelar lo que estaba pasando. Durante este mismo periodo, Peter Paul Von Bauer, se encontraba en Alemania en conversaciones con la Junkers en calidad de representante de la Sociedad Colombo-Alemana de Transportes Aéreos, más conocida como SCADTA; tratando que esta empresa se uniera como socio.


En el año 1920 la situación económica en el mundo era grave; esto se puede denotar en Colombia gracias a los registros de prensa de ese entonces que evidenciaban la elevada cantidad de problemas económicos que atravesaban los bancos en el país; tales como el Vázquez Uribe que contaba con varias sucursales en Nueva York, EE. UU. Es por esta razón, que todos se encontraban comprometidos en buscar la colaboración necesaria de las personas para lograr una inversión SCADTA.






“Es intencionado establecer entre Barranquilla y los puntos finales allende el río Magdalena importantes líneas de transporte para pasajeros y tráfico postal por vía aérea; vendrían en cuestión los sitios Calamar, Puerto Wilches, Puerto Berrío y Girardot como destino final.” Esta es una de las citas que se conservan como registro del proceso de SCADTA al informar a la delegación Alemana en Bogotá su deseo de establecer un servicio de transporte aéreo.








Para el 5 de septiembre de 1920 el sueño ve sus primeros inicios, ya que se sitúa el primer aeroplano con una bandera alemana y una colombiana, adornado con una corona floral para su primer vuelo de pasajeros en el Hidropuerto de Veranillo. En ese mismo año, cuando apenas se comenzaba a fortalecer la aviación comercial en el mundo, Colombia dio pasos significativos en este sentido dándole la bienvenida a este nuevo medio de transporte que permitió superar barreras geográficas en el corto plazo. Durante los veinte años que transcurrieron entre las dos guerras mundiales, se fundaron nueve compañías de aviación en las cuatro principales ciudades que para ese momento lideraban el desarrollo industrial de Colombia. Con excepción de Bucaramanga y Villavicencio; la primera lideraría el desarrollo en el oriente de Colombia y la segunda, apoyada por la aviación se convertiría en la puerta de entrada a los llanos orientales.


El transporte aéreo constituyó uno de los medios de integración económica, acercó las distintas regiones del país, le permitió al Estado establecer contacto con las autoridades y habitantes de las regiones más alejadas, y trajo ventajas en aspectos como el económico.


Hoy Colombia ostenta el título de tener la compañía de aviación más antigua de América, pues su consolidación pasó por el establecimiento de la compañía Colombo-Alemana de Transportes Aéreos, SCADTA, luego en 1940, por la nacionalización de la misma; gracias a la fusión de SCADTA, ya en manos norteamericanas y SACO, Servicio Aéreo Colombiano, se convirtió en Aerovías Nacionales de Colombia, AVIANCA. Desde el 2004 hace parte del grupo empresarial brasilero Synergy, bajo un nuevo nombre Aerovías del Continente Americano, AVIANCA. Todo un logro llevado a cabo por el pionerismo y sentido de colaboración de mentes brillantes que con su trabajo ayudaron a escribir la historia de un país.



A continuación, dejaremos el link de la conferencia para quienes deseen observar cómo fue este maravilloso encuentro.






Our Recent Posts

Archive

Tags

Entrada individual: Blog_Single_Post_Widget
bottom of page